La degollado y le dieron 23 apuñaladas: su novio, único sospechoso está libre

El único sospechoso del crimen de Marianela Rago Zapata, la estudiante de periodismo que encontraron degollada y con 23 puñaladas en el barrio porteño de Balvanera en 2010, fue denunciado ante la Justicia de Tierra del Fuego por violencia de género por otra expareja con la que se relacionó después de cometido el asesinato y con quien tuvo un hijo

Se trata de Francisco Amador, quien a lo largo de la investigación por el caso de la joven asesinada en Balvanera fue procesado y sobreseído cinco veces y actualmente, en libertad, espera el sexto juicio por el homicidio de la adolescente de 19 años, que aún no tiene fecha de inicio.


“Me largué a llorar de forma compulsiva cuando me enteré de la nueva denuncia”, dijo a TN Patricia Zapata, la mamá de Marianela. Y enfatizó: “Nos da mucha bronca e impotencia”. Movilizada todavía por las novedades, la mujer que se puso al hombro hace ya más de una década la lucha para conseguir justicia por su hija espera, por fin, conseguirlo este año.

La nueva denuncia contra Amador es de su última novia, mamá de su único hijo, que le dio una entrevista a la periodista de Río Grande Lorena Uribe. La mujer, cuyo nombre se preserva, contó: “Me aseguró que no podía concebir hijos. Jamás vi un estudio que así lo dijera, pero confié plenamente en su palabra”. Sobre los hechos de violencia, precisó: “Ante cada hecho de violencia, física o psicológica, volvía y pedía perdón, agradeciendo que no lo denunciara”.

Veintitrés puñaladas para Marianela Rago
Marianela había nacido en la localidad fueguina de Río Grande, pero se mudó a Buenos Aires para estudiar periodismo. El 27 de junio de 2010 sus amigos la estaban esperando para ver juntos el partido que la Selección Argentina le ganó 3 a 1 a México por los octavos de final en el Mundial de Sudáfrica, pero ella nunca llegó.

Así fue como horas después, preocupado por su ausencia y porque no respondía los mensajes, su hermano Matías fue a buscarla al departamento que ambos alquilaban en la calle Tucumán al 2000.

La escena con la que se encontró el joven en el interior del departamento del séptimo piso “A” fue dantesca: había sangre por todos lados y el cuerpo de Marianela estaba tirado en el piso.

ADN, sangre y huellas: las pistas que no alcanzaron


El propio Amador volvió a ponerse bajo sospecha al declarar que cuando rompió su relación amorosa con Marianela tenían fuertes discusiones y que ella le reconoció tres días antes de ser asesinada que estaba saliendo con otro hombre.

Por otro lado, en su casa los peritos habían encontrado una remera ensangrentada y dos cuchillos que podrían ser compatibles con el arma homicida, pero una mala preservación de la prueba evitó que el resultado fuera concluyente y, una vez más, el exnovio de Marianela quedó libre de culpa y cargo.

A juicio por primera vez


Entre el 2013 y el 2018, Amador fue sobreseído cinco veces y ahora ira a juicio por primera vez. Tras la pausa general que impuso la pandemia, la Justicia tendrá una nueva oportunidad para determinar quién es el asesino de Marianela y devolverle a su familia un poco de tranquilidad.

El crimen está caratulado como “homicidio simple”, delito que prevé de ocho a veinticinco años de prisión, ya que al momento del hecho aún no estaba tipificada la figura del femicidio. La acusación contra Amador se basa, principalmente, en los antecedentes de violencia y maltrato que hubo en la pareja.

La acusación estará a cargo del fiscal general Sandro Abraldes, uno de los que en el año 2015 logró la condena para Jorge Mangeri por el femicidio de Ángeles Rawson.

“Nunca más vas a dormir tranquila”

Días después de que mataran a su hija, Patricia Zapata contó ante los medios que tanto ella como su marido y hasta las amigas de Marianela le aconsejaban que se alejara de él por su carácter violento. “Tratábamos de decirle que no siga, pero evidentemente esta persona la podía”, se lamentaba frente a las cámaras.

“Marianela me dijo que él la había llamado y le advirtió que no iba a poder dormir tranquila nunca más”, recordó ahora en diálogo con TN, haciendo alusión a una de las últimas conversaciones que tuvieron con su hija. Patricia no tiene dudas de que él la asesinó, pero entiende que “la Justicia necesita que la sangre y el cuchillo se encuentren, y eso no aparece”.